Cinco causas habituales por las que se atascan las cañerías
Una de las averías más frecuentes a las que tienen que hacer frente las empresas de pocería como Benamar es la de los atascos en las cañerías. Lejos de lo que se suele creer, estos no se producen únicamente por la acumulación de residuos y sedimentos en las tuberías de casa. Es decir, aunque los inquilinos de una vivienda pongan todos los medios y sus esfuerzos para evitar que el flujo de agua se vea interrumpido por algún objeto inesperado, aún puede ser necesaria la intervención de especialistas en desatrancos.
Nadie se libra. El fregadero, el sumidero de la bañera o plato de ducha, el lavabo o cualquier otro equipamiento conectado a las cañerías generales de la edificación (sea una casa o un establecimiento comercial) corren el riesgo de sufrir estas molestas averías. Y lo cierto es que se presentan en más ocasiones de las que podríamos desear. Desde Pocería Benamar, como expertos en obstrucciones, limpiezas y mantenimiento de tuberías, te contamos cuáles son las causas más habituales por las que se producen los atascos en cañerías.
¿Tubería atascada? Las cinco razones más habituales
Cuando aparecen los primeros síntomas de un atasco en una tubería, hasta el menos manitas intenta ponerle solución por sus propios medios. Pero, a la larga, la avería inicial o la solución casera puede convertirse en un auténtico dolor de cabeza. Cuando las cañerías de casa, del negocio o de cualquier otro tipo de edificación muestran problemas de obstrucción notables, lo recomendable es ponerse en contacto con especialistas en desatrancos. Ellos encontrarán la causa principal de la avería y aportarán la solución más adecuada.
Como expertos en desatrancos, desde Pocerías Benamar podemos destacar las cinco causas más habituales de los atascos en cañerías:
- Vertido de residuos. El mal uso de los desagües o sumideros es un viejo conocido de los profesionales de la pocería. Muchos usuarios utilizan el lavabo, el fregadero e, incluso, el retrete como vertedero. En ocasiones, de manera inconsciente. Los restos de comida, los pelos, las grasas, algunos jabones, etc., son los principales causantes de los atascos en cañerías.
- Tuberías antiguas o en mal estado. Todas las instalaciones antiguas terminan generando problemas. En el caso de las cañerías, el paso del tiempo hace que pierdan propiedades, ganen adherencia y dificulten el paso del agua con normalidad y fluidez.
- Errores en la instalación de tuberías. Una mala inclinación de las cañerías puede llevar al traste su correcto funcionamiento. Por esta razón, siempre se debe contar con la mano de profesionales, que saben colocarlas sin fallos por exceso o por defecto de pendiente.
- Dependiendo de la dureza del agua y del tiempo transcurrido desde la instalación o mantenimiento de la tubería, los sedimentos de cal pueden terminar obstruyendo el paso del agua.
- Obstrucciones en canalones. Algunos condicionantes exteriores como las lluvias o la caída de ramas y hojas, pueden provocar que las bajantes de los edificios colapsen. En este sentido, también es importante realizar controles periódicos de estas instalaciones.
Si utilizas todos los desagües de tu casa con el máximo cuidado y evitas por todos los medios el vertido de cualquier tipo de residuos, pero tienes tuberías atascadas, ponte en contacto con Pocería Benamar. Buscaremos entre las otras cuatro razones la que está provocando la avería en tus instalaciones.